Las consecuencias de una deficiente y negligente política ambiental en Chile han conllevado, entre otras cosas, la profundización de graves daños a los ecosistemas y pueblos que se relacionan con estos. Sin embargo, el anclado modelo extractivista continúa siendo el respaldo para el actuar desmesurado en la explotación de bienes comunes, entre los que se encuentra el metal del cobre.
La localidad de El Melón forma parte de la comuna de Nogales[1] -región de Valparaíso- y cuya historia se encuentra cruzada por la depredación de la minería del cobre mediante faenas de la mina El Soldado. Y es que la trayectoria de la minería[2] en el territorio contempla incluso fines del siglo XIX en la Cordillera El Melón, la cual pasó por la administración de diversas sociedades, entre quienes se encuentra la Compañía Minera Disputada de Las Condes (1958) y, actualmente, la transnacional Anglo American de capitales ingleses, cuya filial chilena se enmarca en la división Anglo American Sur, la cual está encargada de la explotación desde el año 2002.
Sin embargo, más allá de la administración de las faenas, la minería ha traído consigo graves afectaciones para las y los habitantes de El Melón, en un escenario caracterizado actualmente por la crisis hídrica y la contaminación como factores que, acusan desde las comunidades, afectan la dignidad humana y son agudizadas por el extractivismo sostenido por Anglo American.
LEE EL INFORME COMPLETO: https://divestinmining.org/wp-content/uploads/2022/08/Informe-MINA-EL-MELON.pdf